El radar ubicado en el kilómetro 20 de la M-40, a su paso por Madrid, fue el más activo de toda España en 2024, con un total de 74.873 denuncias por exceso de velocidad, según el último informe de Automovilistas Europeos Asociados (AEA) basado en datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Pese a este volumen, el dispositivo ha reducido su actividad un 36 % respecto al año anterior.

En conjunto, los radares de la DGT formularon durante el pasado año 3.440.655 denuncias, lo que equivale a casi 10.000 sanciones diarias, un 4 % más que en 2023. De esta cifra, más del 30 % corresponde tan solo a 50 radares del millar desplegado en todo el país.

Madrid, aunque en sexta posición nacional con 303.124 denuncias (un 11 % menos que el año anterior), sigue destacando por el número de dispositivos entre los más activos. Tras el radar del km 20 de la M-40, figuran otros como el del km 52 de la misma vía (33.057 sanciones), el del km 13 de la A-4 (18.263) y el del km 15 de la A-2 (15.713).

Por comunidades, Andalucía lidera el ranking con 959.592 denuncias, seguida de Castilla y León (413.343) y la Comunidad Valenciana (366.360). Madrid ocupa el sexto puesto.

El informe también destaca aumentos llamativos como el radar del km 245 de la A-4, en Jaén, que ha pasado de apenas dos denuncias en 2023 a más de 24.000 este año. Casos similares se dan en Burgos (A-1, km 231) y Cádiz (A-381, km 74), donde los incrementos superan el 500 % y el 1.400 %, respectivamente.

AEA critica que el mayor número de sanciones se imponga en autopistas y autovías, mientras que en las carreteras secundarias —donde ocurren el 70 % de los accidentes con víctimas— la presencia de radares es significativamente menor.

"El objetivo de los radares debería ser prevenir accidentes, no recaudar", ha denunciado el presidente de AEA, Mario Arnaldo, quien considera que la DGT debería replantearse su política sancionadora.