La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el primer centro público de atención integral para mujeres que desean abandonar la prostitución. Este dispositivo pionero en España está ubicado en Leganés y ha sido diseñado para ofrecer un acompañamiento completo en el proceso de recuperación y reinserción social de estas mujeres.

El nuevo recurso cuenta además con una unidad móvil de intervención, en la que trabajan profesionales como trabajadoras sociales y mediadoras interculturales. Este equipo se desplaza a puntos donde se ejerce la prostitución -calles, clubs o pisos-, para informar a las mujeres sobre el centro y los servicios disponibles, entregándoles material preventivo y asesorándolas en cuestiones legales, de salud y extranjería.

Desde su puesta en marcha en marzo de 2025, la unidad móvil ha recorrido once municipios de la región, incluyendo Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Alcorcón, Móstoles y Alcalá de Henares, entre otros. En total, ya se ha prestado atención a 186 mujeres, a quienes también se les ha ofrecido seguimiento a través del servicio telefónico y de videollamada del centro.

Durante la visita inaugural al centro, la consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, destacó que este espacio representa "el inicio de una vida nueva, digna y segura" para las mujeres atendidas. Subrayó además la importancia de proporcionarles herramientas que les permitan lograr una verdadera inclusión en la sociedad.

El recurso está gestionado por APRAMP, una organización con amplia experiencia en el acompañamiento a víctimas de explotación sexual. Su equipo multidisciplinar -compuesto por 16 profesionales, entre ellos psicólogos, abogados y técnicos de integración social-, trabaja con las usuarias mediante planes individualizados, que incluyen atención psicológica, social, sanitaria, jurídica y laboral.

Desde la aprobación de la normativa autonómica en 2005, la región ha desarrollado numerosos recursos de emergencia, acogida y atención integral. Actualmente, dispone de 324 plazas residenciales para víctimas de violencia y sus hijos, además de dispositivos como el CIMASCAM, dos Centros de Crisis 24 horas y 56 puntos municipales de atención especializada.